El Derby de Manchester siempre trae consigo una dosis de emoción, pero este encuentro en el Etihad Stadium dejó a los aficionados al fútbol boquiabiertos. El Manchester City, que parecía tener el partido bajo control, vio cómo el Manchester United le arrebató la victoria con una remontada electrizante en los últimos minutos.
Los Red Devils, liderados por su resiliencia, se llevaron un triunfo 2-1 que pone en evidencia la crisis que atraviesan los Citizens en esta temporada de la Premier League.
Un Primer Tiempo De Control Pero Sin Profundidad
Desde el silbatazo inicial, el Manchester City se adueñó del balón. Con su estilo característico de posesión, los dirigidos por Pep Guardiola buscaban abrir los espacios en la defensa del United. Aunque lograron mantener el control del juego, no lograron generar muchas oportunidades claras en el área rival.
Por su parte, el Manchester United planteó un esquema táctico inteligente. Con una defensa compacta, los Red Devils se enfocaron en cortar los circuitos creativos del City, especialmente evitando que Kevin De Bruyne y Bernardo Silva tuvieran libertad para maniobrar. La estrategia parecía estar funcionando hasta que una jugada aislada rompió la paridad.
Al minuto 36, De Bruyne demostró por qué es uno de los mejores pasadores del mundo. Desde la banda izquierda, envió un centro milimétrico al área que encontró a Josko Gvardiol. El defensor croata, quien había sido cuestionado por errores en partidos anteriores, conectó un cabezazo preciso que dejó sin opciones al portero del United.
Este gol no solo puso al City en ventaja, sino que también le devolvió confianza a Gvardiol, quien celebró con efusividad ante su afición.
Un Segundo Tiempo De Paciencia Y Dramatismo
La segunda mitad del partido mantuvo la misma dinámica. El City dominaba la posesión, pero sus ataques carecían de la profundidad necesaria para inquietar al United. Guardiola, visiblemente frustrado en la línea de banda, intentó ajustar el esquema con cambios ofensivos, pero el equipo no lograba encontrar la contundencia que necesitaba para asegurar la victoria.
El United, por su parte, se mantuvo firme en su plan de esperar un error del rival para contraatacar. Y esa oportunidad llegó, pero no sin un toque de dramatismo.
Todo cambió en los últimos minutos. Al minuto 87, un error de Matheus Nunes marcó el inicio de la remontada. En un intento por retrasar el balón hacia Ederson, Nunes no calculó bien, permitiendo que Amad Diallo interceptara el pase. El joven atacante marfileño ingresó al área y fue derribado por el propio Nunes, lo que llevó al árbitro a señalar la pena máxima.
Bruno Fernandes, con su característico temple, cobró el penalti con precisión, engañando por completo a Ederson para empatar el marcador 1-1. La celebración del United fue efusiva, pero lo mejor estaba por venir.
Solo dos minutos después, en el 89, Lisandro Martínez demostró su calidad con un pase filtrado que dejó a Diallo frente al arco. El delantero mostró gran serenidad al eludir a Ederson y rematar con poco ángulo para poner el 2-1 definitivo. La remontada fue tan rápida como inesperada, dejando atónitos a los jugadores del City y a su afición.
Con esta derrota, el Manchester City cae al quinto lugar de la tabla con 27 puntos, quedando fuera del top-4. Liverpool, Chelsea, Arsenal y Nottingham Forest ocupan las primeras posiciones, ampliando la distancia con los actuales campeones de Inglaterra.
Para el Manchester United, el triunfo es un rayo de esperanza en una temporada complicada. Aunque todavía se encuentran en la posición 13 con 22 puntos, esta victoria puede ser el impulso que necesitan para empezar a escalar posiciones en la Premier League.
🏴⚽ ¿Quién celebrará primero en el Derbi de Manchester?#ErlingHaaland es el actual máximo artillero de la #PremierLeague. Por su lado, Rasmus Højlund anotó tres goles en los últimos dos partidos del #ManchesterUnited. 🔥
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— Betcris (@Betcris) December 15, 2024
Un Derby Que Quedará En La Memoria
El Derby de Manchester volvió a demostrar por qué es uno de los partidos más apasionantes del fútbol inglés. La combinación de emoción, rivalidad y momentos inesperados hizo de este encuentro uno para el recuerdo.
Para el City, el resultado es un llamado de atención. Las expectativas sobre el equipo eran altas tras dominar el fútbol inglés en años recientes, pero las inconsistencias de esta temporada empiezan a preocupar a sus seguidores. Guardiola y su equipo tendrán que trabajar duro para recuperar el nivel que los llevó a la cima.
Por otro lado, el Manchester United mostró que, aunque está lejos de su mejor versión, aún tiene la capacidad de dar pelea en los momentos importantes. Esta victoria no solo les da tres puntos valiosos, sino que también refuerza el espíritu de un equipo que busca resurgir.
Este Derby nos recordó que en el fútbol nada está decidido hasta el último minuto. La rivalidad entre estos dos equipos sigue escribiendo capítulos llenos de intensidad y pasión, y este partido no fue la excepción.
