Las dificultades ofensivas de los Reales de Kansas City fueron evidentes en el Juego 3 de la Serie Divisional de la Liga Americana contra los Yanquis de Nueva York, ya que solo lograron seis hits a lo largo del encuentro.
Un Juego Difícil de Pocas Oportunidades Ofensivas
El abridor de los Yanquis, Clarke Schmidt, limitó a los Reales a solo cuatro hits durante su salida, y el equipo solo pudo agregar dos hits más contra tres relevistas de los Yanquis.
A pesar de que tuvieron corredores en base en cuatro de las primeras cinco entradas, la ofensiva de Kansas City solo pudo concretar en la quinta entrada, cuando Kyle Isbel y Michael Massey conectaron hits impulsadores con dos outs para empatar el juego 2-2.
En la sexta entrada, los Reales tuvieron otra oportunidad de anotar cuando Bobby Witt Jr. recibió un boleto con un corredor en tercera, pero Vinnie Pasquantino no pudo capitalizar, al volar hacia el jardín central para terminar la entrada. Witt Jr. volvió a llegar a base en la octava entrada con un hit, avanzando a tercera después de que Salvador Pérez conectara un hit.
Sin embargo, Yuli Gurriel terminó la entrada volando hacia el jardín central, dejando a los Reales sin más carreras. Al final, Kansas City dejó a seis hombres en base y estuvo 1-for-5 con corredores en posición de anotar, lo que demostró ser un factor importante en su incapacidad para generar impulso ofensivo.
Las dificultades de los jugadores clave de los Reales en el plato han sido evidentes a lo largo de la serie. Bobby Witt Jr. tiene un promedio de 1-for-13, Vinnie Pasquantino permanece sin hits con un 0-for-12, y aunque Salvador Pérez ha logrado tres hits en 12 turnos al bate, no ha sido suficiente para elevar el rendimiento ofensivo del equipo.
Estas actuaciones decepcionantes de los jugadores clave de los Reales han dejado oportunidades cruciales sin aprovechar, especialmente en juegos cerrados donde las carreras son muy importantes.
Octava Entrada Decisiva
El juego dio un giro decisivo en la parte alta de la octava entrada cuando Giancarlo Stanton conectó un jonrón solitario que puso a los Yanquis por delante 3-2. Este golpe en las últimas entradas resultó ser el ganador del juego, ya que los Reales no pudieron recuperarse tras el jonrón de Stanton.
A pesar de su victoria, los Yanquis también enfrentaron dificultades con corredores en posición de anotar, y finalizaron 0-for-6 en dichas situaciones, dejando 11 hombres en base. Si los Reales hubieran podido aprovechar la incapacidad de Nueva York para capitalizar sus oportunidades, el resultado del juego podría haber sido diferente.
Las dificultades en el pitcheo de Kansas City también jugaron un papel significativo en su derrota. Los bateadores en la primera posición de los Yanquis han encontrado éxito de manera constante en la serie, alcanzando base 16 veces en 26 entradas. Ocho de estos corredores eventualmente anotaron, lo que complicó aún más la tarea de los Reales para contener la ofensiva de Nueva York.
En el Juego 3, el abridor Seth Lugo permitió que el bateador inicial llegara a base en la cuarta y quinta entrada, lo que llevó directamente a las dos primeras carreras de los Yanquis. En la cuarta entrada, Lugo dio un boleto a Juan Soto, y aunque retiró a los siguientes dos bateadores, permitió un doble a Stanton, que llevó a Soto a anotar la primera carrera de los Yanquis.
En la entrada siguiente, Anthony Volpe abrió con un hit y posteriormente anotó con un elevado de sacrificio de Soto, poniendo a los Yanquis adelante 2-0 en ese momento.
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— Betcris (@Betcris) October 10, 2024
El Problema de las Bases por Bola
Las bases por bolas también han sido un problema persistente para el personal de pitcheo de Kansas City. Los lanzadores de los Reales otorgaron un récord de temporada de nueve bases por bolas en el Juego 3, aumentando la presión sobre el equipo mientras luchaban por navegar alrededor de los corredores adicionales.
Aunque solo una de estas nueve bases por bolas resultó en una carrera en este juego, el número total de pasaportes otorgados en la serie ascendió a 22, destacando un problema recurrente. En el Juego 1, tres de las ocho bases por bolas permitidas por los lanzadores de los Reales llegaron a anotar en lo que fue una derrota por una carrera.
Las bases por bolas han sido un factor decisivo en las derrotas de los Reales, especialmente en las derrotas por una carrera en los Juegos 1 y 3, donde los pasaportes han influido directamente en el resultado.
De cara al Juego 4, programado para el jueves 10 de octubre, los Reales se encuentran en una situación de vida o muerte, ya que están perdiendo 2-1 en la serie. Con el impulso ahora del lado de los Yanquis tras su victoria en el Juego 3, Kansas City necesitará encontrar la manera de recuperarse rápidamente, o arriesgarse a ser eliminados de la postemporada.