En las primeras etapas de la temporada 2024 de las Grandes Ligas de Béisbol, Ranger Suárez, el lanzador abridor de los Filis de Filadelfia, labró un récord excepcional, entrando a un juego contra los Rockies de Colorado con una impresionante marca de 9-0 y una ínfima efectividad de 1.36 en sus primeras 10 aperturas.
Tales estadísticas situaron a Suárez entre unos pocos seleccionados en la historia de las Grandes Ligas que han logrado un comienzo tan notable de campaña.
Sin embargo, la racha de Suárez llegó a un final abrupto en el último juego de la serie contra Colorado.
Primera Derrota de Ranger Suárez
Su rendimiento flaqueó desde temprano, concediendo cinco carreras en las dos primeras entradas, marcando su primera derrota en 11 aperturas.
Mientras que los logros individuales de Suárez fueron destacables, los Filis como equipo habían mantenido una sólida trayectoria, sin perder una serie desde principios de abril cuando fueron derrotados por los Rojos.
No obstante, su serie contra los Rockies se caracterizó por dificultades ofensivas. Aparte de un notable noveno inning con seis carreras en un juego, el equipo apenas logró anotar seis carreras durante toda la estadía de tres juegos en Coors Field, un estadio reconocido por sus juegos de alta puntuación debido a su elevación.
Durante la cuarta entrada de un juego, Suárez vivió un momento angustioso cuando una línea impulsada del bate de Elehuris Montero, viajando a 110 millas por hora, apenas le evitó golpearle en la cabeza.
Aunque Suárez evitó lesiones graves, el incidente dejó una impactante huella mientras él brevemente titubeó en el montículo, tomando un momento para reponerse. Agradecidamente ileso, Suárez atribuyó su seguridad a circunstancias afortunadas, reflexionando sobre el susto después del juego.
Al reflexionar sobre su actuación, Suárez reconoció sus dificultades iniciales, especialmente con el control de su cambio y curva. Estas deficiencias permitieron a los Rockies capitalizar y anotar carreras tempranas.
A pesar de este difícil inicio, Suárez mostró resiliencia al recuperarse y retirar a 13 bateadores consecutivos después de un segundo inning complicado, lanzando en última instancia seis entradas completas.
Was this a better play by Ranger Suárez or Bryson Stott? 😬
[via @MannyOnMLB]
— Phillies Nation (@PhilliesNation) May 26, 2024
Mala Noche
Los problemas ofensivos de los Filis reflejaron las dificultades iniciales de Suárez en el montículo. A lo largo de la serie, el equipo bateó colectivamente apenas .184, a excepción del explosivo estallido ofensivo en un inning.
El manager Rob Thomson y los jugadores reconocieron la baja ofensiva, describiendo la serie como un período difícil pero manteniendo el optimismo sobre la posibilidad de recuperarse en los próximos juegos. Thomson caracterizó la serie como “extraña”, señalando la disparidad entre las expectativas y los resultados en Coors Field.
“Un poco extraño, ¿verdad?” dijo Thomson después de la derrota del domingo. “Vienes aquí y piensas que debido al aire delgado vas a anotar muchas carreras y batear jonrones. No tuvimos ninguna fuerza hoy. “Es solo uno de esos días. Supongo que uno de esos fines de semana.”
Normalmente un estadio favorable para los bateadores debido a su atmósfera delgada, los Filis anticiparon una mayor producción ofensiva, pero encontraron desafíos formidables en su lugar. Thomson enfatizó la naturaleza caprichosa del béisbol, donde incluso equipos bien preparados pueden enfrentar adversidades en enfrentamientos específicos.
Tanto Suárez como los Filis ahora permanecen firmes en su enfoque hacia la temporada en general. A pesar del contratiempo en Colorado, lo ven como una fase transitoria más que como un revés definitivo.
Con juegos próximos contra los Gigantes de San Francisco y las ambiciones de concluir mayo en alto, el equipo aspira a recuperar el impulso y mantener su búsqueda del éxito en el competitivo panorama de las Grandes Ligas de Béisbol.